GH el reencuentro: Gala de presentación

10 años, 11 ediciones, 164 concursantes... Gran Hermano "¡no deja de sorprendernos!", como ha exclamado una emocionada Milá y se ha reinventado con "El Reencuentro" para rizar el rizo televisivo. Lo que para Mercedes es "un nuevo formato que hará historia", ha unido en ¿amor y sintonía? a seis parejas que tienen en pie de guerra sus rencillas más profundas. Raquel y Noemi; Piero y Melania; Nacho y Desi; Arturo e Indhira; Bea (la legionaria)y Niky y Aída y Fresita (como visitantes trasitorias) han sido los doce elegidos.

El plató ha vibrado con cada nuevo rostro que abría la puerta de Guadalix. Casi todos los doce ex concursantes elegidos tenían en común una historia de amor y duelo, de pasión y dolor. Habían dicho mucho de lo que se arrepentían, otro tanto de lo que no, pero sobre todo tenían asuntos pendientes que solucionar con ese otro yo que en un tiempo remoto fue su alma gemela. En el caso de Niky y Bea (la Legionaria), el amor no fue tal sino pasión por los decibelios.

El premio, si hacen las paces

Lo que ellos no saben y Mercedes ha confesado a la audiencia es que el premio, que lo habrá, sólo podrá ser conseguido por parejas. Es decir, la colaboración entre los dúos pasa a ser una condición 'sine qua non' para vivir el concurso, porque lo conseguirá "aquella pareja que convenza a la audiencia de que ha superado el pasado". ¡La aventura suelta amarras!.

Como sorpresa transitoria estaban Fresita y Aída Nízar. La primera porque Nico, el italiano, quería pedirle disculpas "por haber hablado mal de ella en un programa de televisión" y porque ambos "habían sufrido mucho tras su ruptura". También tenía Fresita que hacer las paces con otro ser... La vaca Antonia, "representación de todos los animales del concurso", según Milá, representaba sobre a a otra vaca, Carolina, que protagonizó junto a Fresita uno de los momentos más hilarantes de la televisión.

Amor y dolor

La primera pareja en entrar fue Melania y Piero. Se eamoraron en GH 9, protagonizaron una sonada hora sin cámaras y acabron viviendo juntos fuera, antes de romper definitivamente. Frente a su video con los momentos más románticos (posterior a un emotivo abrazo), ella se ponía seria y él sonreía.

Las que no sonrieron nada al verse fueron Noemí y Raquel. Casadas al salir del programa, su divorcio y accidente de coche fue prácticamente televisado en directo por varios programas. Noemí fue la primera expulsada de GH 3, a los seis días, y Raquel fue recordada por su carácter. "¿Nos tenemos que quedar aquí?", preguntaba Noemí al encontrársela en el Confe. "Espero que no, que si no me da un infarto", respondía Raquel.

Desi y Nacho se quedaron boquiabiertos al verse. Tras su romance en GH 4, que les dio un hijo en común, ambos han rehecho su vida junto a otras peronas. Ella vive en suiza junto a su marido y el hijo de ambos, que les sirvió para romper el hielo. "¿Cómo está el niño?", "Está malo", "¿Malo? Yo también he estado malo", ¿Sí, y estás mejor?". El momento más tenso fue delante del video de sus momentos más felices. Ella se tapaba la cara. Él mantenía el gesto impertérrito. Luego, se sonreían. ¿Donde hubo amor quedan brasas?.

Rencores olvidados

Nico, que ha tenido un hijo desde su salida, tenía pendiente de solución su ruptura abrupta con Fresita y un mal entendido que levantó ampollas. Fue con Ainhoa, una concursante de su misma edición (GH 5), a la que llamó "puta". Ella ha aguantado estoicamente el video con el momentazo, mientras el italiano trataba divertido de taparle los oídos.

De GH 6 han entrado Bea (la legionaria) y Niky, uno de los tres transexuales que ha pasado por el concurso. La militar se trajo consigo un chupete del ser que más quiere, su hijo. "Noble y más testaruda que un mulo", como la ha descrito Milá, saludó deportivamente a su pareja de viaje, Niky, con quien había protagonizado más de un desencuentro. "Somos iguales que hace seis años, sólo que con más canas", explicaba él como una declaración de intenciones.

Resquemor a flor de piel

La pareja que más repercusión ha tenido en plató ha sido la de Indhira y Arturo. Tras su sonado ni contigo ni sin ti, sus paseos por los programas poniéndose de colores, ambos se reencuentran en la casa que vio nacer su pasional encuentro. "Estoy muy contenta. Es el último sitio que pisé antes de salir expulsada", decía Indhira desde el confe. "He dudado en entrar, pero aquí estoy, dispuesta vivirlo todo a tope".

Arturo se mostraba menos elocuente. Tanto, que ha saludado a todos menos a su ex. En el video de presentación, avisaba: "Me imagino que van a meter a la india. Me apuesto el Delfín". Fue una sorpresa salir y ver que la persona que creí que iba a ser más mi amiga, era la que ahora no puedo ni ver. Me afectó, pero ya no. Si cree que me voy a cortar si hay alguien que me gusta, que se piense el entrar. Si hay alcohol, me lo bebo. Si hay comida, me la como y si tengo que mantener relaciones sexuales, las tengo".

Aída contra el mundo

La entrada de Aída fue la más fría. Muchos habían dejado claro que con quien no querían estar era con ella y "la comunicadora" había tomado nota de los ánimos."¿En qué quedamos, somos hipócritas o no?", soltaba con el primer saludo. "¡Y viva la hipocresía entonces!", añadía con el segundo. Luego, remataba: "Prefiero hablar con Dios que hablar con semejante chusma". (fuente:telecinco.es)

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Después de once ediciones
“Gran Hermano” se mantiene,
y con todos los honores,
en el Top Ten de la Tele.
Esta vez, sobre la marcha,
dan otra vuelta de rosca
y aprovechando la casa
van y sacan de la gorra
por la cara otro programa:
Han inventado un refrito
y cual si fueran cobayas
pueden verse allí metidos
y luchando por la pasta
un grupo de famosillos
(porque a famosos no alcanzan);
parejas desencontradas
de anteriores ediciones
que aceptan ser encerradas
en el mismo sitio donde
acariciaron la fama
a fin de recuperarla.

El programa les propone
llevarse toda una pasta
si ellos son los que soporten
hasta el último programa
y liman sus diferencias,
o reencuentran el amor,
o remueven sus conciencias
o pegan un revolcón
(que todo el mundo presencia)
debajo del edredón.

Pues con la dicha propuesta,
para nada original,
que “Gran Hermano” presenta
han conseguido alcanzar
un 24 %
de la audiencia de esa noche.
Yo la verdad es que pienso
que vemos lo que nos ponen.

Pero en el fondo no extraña,
no olvidemos que vivimos
en nuestra querida España
cuyo vicio siempre ha sido
comentar vidas ajenas
y juzgar a los demás,
y más si además nos dejan
hacerlo desde el sofá.

Y aquí dejo ya la rima
porque empieza “Gran Hermano”
y yo no me pierdo a Aída,
que de borde tiene un rato,
en ese programa metida
con los otros cuatro gatos
llamándole perra judía
y a ella despotricando.